
Con este magno titular me despertaba esta mañana.
Alarmado, he puesto toda mi atención en el desarrollo de esa noticia.
Claro porque me preguntaba ¿que habrá podido hacer o decir ese buen hombre para que la prensa lo considerara un traspié?
¿Habrá acaso comentado alguna cuestión inconveniente sobre la república o la monarquía?
¿Se habrá equivocado en algún discurso oficial?
¿Habrá cantado el Asturias Patria Querida rodeado de catalanes?....
A ver ¿pa que piensas tan deprisa? Inmediatamente nos aclaran que fue un tropezón con un escalón, pero que afortunadamente ¡no cayó al suelo hombre!. Me tranquilizo.
Claro que la noticia, siendo ya importantísima, se vuelve casi dramática cuando nos cuentan que Maragall también tropezó en el mismo sitio. ¡Dios!
Es verdad que no aclaraban si era a las copas o al principio de la cena...
¡Ni que decir tiene que tuve un sobresalto mayúsculo al enterarme de que el mismísimo Pujol también había tropezado en el mismo escalón ¡Válgame el cielo!
Mirad, yo no puedo por menos que hacer una reflexión sobre este asunto.
En primer lugar es posible que el escaloncito de marras esté diseñado con el "ponpis", pero también es posible que alguien tuviera que decirle a estos señores que beban con moderación.
O a lo mejor se trató de un acto de solidaridad (casi peloteo) de los dos ex presidentes de la Generalitat con su Majestad.
En cualquier caso, ¿no os parece que tenemos asuntos mas importantes en este país como para que el primer titular de la mañana sea el dichoso traspié?
En fin prometo darme una vuelta por la isla Perejil (gran icono de la patria) para ver si han destinado allí al diseñador de la cosa.
Por cierto, para los mal pensados, esa foto es de la isla Perejil no de Barcelona...